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El ego nos pierde

  • por
estrés laboral

¿Cuántas veces te encuentras en el trabajo con personas egocéntricasJefes, compañeros, directivos, equipos, clientes, proveedores, colaboradores… más de uno tendrá este perfil.

Normalmente, el egocentrismo esconde necesidades insatisfechas y carencias afectivas.

Es un reclamo de la atención que se auto refiere todo el tiempo a la propia persona. Y en sus distintas escalas, va anulando más o menos la atención hacia los demás. Como si el resto del mundo fuese invisible y no existiera.

El ego se refuerza desde el personaje (la identidad que construimos).

Pero el personaje no es real. Simplemente es una auto imagen que ha tomado el control de la mente.

El trabajo es uno de los ámbitos donde existe mayor identificación

Si nos identificamos con lo que hacemos en el trabajo, creyendo que somos ese cargo, ese rol, ese puesto de trabajo, olvidando todo lo que somos más allá del trabajo… El personaje ganará terreno en nuestras vidas.

En el burnout a menudo nos dejamos dominar por un personaje tirano. Ese que no te permite parar, reenfocar tu vida laboral, decidir lo que te conviene y lo que no.

La tiranía de tu propio ego se niega a reconocer que no puedes más.

El super héroe o la super heroína, tirando con todo a pesar de la frustración, el agotamiento, la ansiedad, el insomnio y el estrés diarios.

Si sufres estrés debido al trabajo, habitualmente cedes tu poder al egocentrismo. El de todos los personajes que te estresan en tu entorno laboral y que te hacen la vida difícil.

Porque permites que sean los protagonistas de tu narrativa mental, de tus pensamientos.

También cedes tu poder al egocentrismo de tu propio personaje.

Porque te condenas a mantenerte en el sufrimiento, pase lo que pase y cueste lo que cueste, creyendo que “esto es lo que hay”.

El ego que no vemos venir, el ego que no controlamos y auto regulamos… nos pierde. Venga de ti o de otros.

La gestión del estrés en el trabajo, pasa por recuperar tu poder profesional y personal.

Pasa por dejar de darle tu atención a lo que no te interesa y a quienes no te interesan.

Pasa por dirigir tus pensamientos hacia lo que sí es interesante para ti. Empezando por ti.

¿Podemos crear una realidad sin sufrimiento en el trabajo?

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